Cambia... todo cambia
- Gabriela Umaña
- 19 sept 2022
- 2 Min. de lectura
¿Has escuchado la frase "lo único constante, es el cambio"? Bueno, yo sí y muchísimas veces y la verdad siempre creí que asimilaba mal los cambios, hasta que me tocó enfrentarme a uno enorme, un cambio que no solo transformaba todo a mi alrededor, sino que también me hacía enfrentarme a uno de mis temores más grandes. Y la impotencia que podemos sentir al enfrentarnos a situaciones que no podemos cambiar es enorme, desgastante tanto física como mentalmente y muy retadora. ¿Pero sabés algo? aquí sigo, transformando mi vida después de una temporada que me golpeó muchísimo, que me cambió también a mí como persona y que me hace quiera o no, enfrentar los días "lo más normal" posible cuando ya nada es igual.
Todo esto me enseñó claramente que TODOS pasamos por situaciones difíciles, buenas y malas temporadas, porque sí, hay temporadas malas aunque muchas teorías de positivismo tóxico quieran decirnos que no, que solo son oportunidades para aprender... por supuesto que aprendemos pero eso no quita que sean complicadas y feas de pasar.
También aprendí que es cierto cuando dicen que "los tiempos difíciles siempre revelarán a los verdaderos amigos", hay personas que nos acompañan solamente en algunas temporadas, mientras que hay otros (desgraciadamente los menos) que nos acompañarán en todas las temporadas, y eso también es parte de la vida, es normal que pase y debemos aprender a soltar inclusive esas personas que queremos pero quizá no saben cómo estar con nosotros.
Por eso debemos valorar a las personas que sí están, a las que aún sin saber cómo se mantienen a nuestro lado, a los que preguntan una y mil veces que cómo estamos y si ocupamos algo, aunque ya sepan la respuesta... a los que nos conocen y saben qué necesitamos en cada situaciones, a esas personas debemos valorarlas y cuidarlas como un tesoro.
Está bien no estar bien todo el tiempo, aprender a disfrutar los buenos momentos con toda el alma, vivirlos y atesorarlos en el corazón para cuando vengan los momentos difíciles recordemos que no siempre ha sido así y que todo eso algún día, también pasará y volveremos a sonreír, a vivir y a respirar sin que duela tanto.
Así que no sé qué estés pasando hoy, no sé si sos la persona que va cuesta arriba o la que acompaña a esa persona, pero sea cual sea tu posición tratemos de enfrentar el camino con amor, empatía y mucha valentía. ¡Un abrazo!

Comments